EL PODER DE LA RUAH

En las lecturas de hoy el autor de la I carta a los Corintios nos recuerda que "hay diversidad de ministerios pero un mismo Señor; hay diversidad de funciones, pero un mismo Dios* (aunque le pongamos muchos otros nombres), que obra en todas las personas. En cada ser humano el Espíritu-La Ruah se manifiesta para el bien común. Y así, todos/as nosotros/as, judíos y griegos, esclavos, gentiles -hombres y mujeres, sin distinción de etnia, cultura, orientación sexual, pensamientos, religión- hemos sido bautizados/as en un mismo Espíritu para formar un solo cuerpo".  
Inspirada por la Ruah es esta tarde, me dejo seducir por su aliento; tocada por su fuerza irracional, invisible pero al mismo tiempo cautivadora e incansable a seguir sus pasos en este santo misterio del apostolado y la justicia social.
Sin saber muy bien a dónde me conducirán sus bellos cantos al oído. Tan sólo siento que me llama por mi nombre y me invita a extender por todos los rincones de la tierra, ese mensaje liberador de su Evangelio.

Hijas de Tamar, que defendéis la justicia...dejadme entrar en vuestro templo de gloria y acompañadme en este proceso de búsqueda y de iniciación.

Hoy escucho la herencia de vuestros mensajeros: hombres de Dios, que como el Cardenal Romero, por fin y a regañadientes consigue la oficialidad de su santidad, aunque para muchos de nosotros/as ya era santo y mártir desde la fecha misma de su nacimiento.
Que tu espíritu padre Oscar, nos guíe y nos refuerce en este camino que iniciamos hoy. Y sobre todo, Espíritu-Ruah, danos luz para ver tu voluntad y fuerza para seguirla.