CON TODO MI CARIÑO PARA TI, PAPÁ

La verdad es que nunca dejo de pensar en ti. Aunque quisiera no puedo hacerlo. Os tengo delante a mamá y a ti todo el rato, mientras hago esos pequeños arreglos de costura, o mientras realizo el ejercicio físico de la mañana. Esa coqueta y pequeña "habitación de pensar" tan llena de recuerdos.
Me produce sonrisa tu retrato sobre la bandera republicana que colocamos justo un día como hoy, día en que te marchas y también día en que es coronado Felipe VI. Siempre dando la nota, hijo.

También estás en el lugar de trabajo. Ese espacio que he conseguido hacer mío, especial, compartido con confidencias, lágrimas, sentimientos, preocupaciones y una preciosa vista de nuestro pueblo. Todo se llena con tus recuerdos, tus pensamientos, tus obras. Es eso lo que me inspira cada mañana a seguir adelante con entusiasmo, sin bajar la guardia ni la energía.

Sigo acudiendo a ti en esos momentos de duda y de dificultad. Y escucho perfectamente lo que podrías decirme en cada momento. Así que la verdad, no puedo echarte de menos, porque te tengo muy cerca, siempre.

Hoy especialmente sólo quería comentarte que estés tranquilo. Creí que nunca podría decirte esto, pero ¿sabes? Realmente hay gente extraordinaria que cuida de mi aquí abajo. Y cuidan de mi, muy bien.

Te propongo que sigas disfrutando de tu estancia entre ángeles. No les revoluciones demasiado con que tienen que asociarse para la búsqueda de sus derechos, ni nada por el estilo que te conozco. Tú sólo, disfruta y espérame. En cualquier momento, volvemos a encontrarnos...

Pero mientras tanto, permíteme que recupere alguna de esas frases tuyas que siempre son enseñanza viva y práctica y hoy especialmente me resulta muy necesaria:

"Siempre, haz todo lo que creas que debes hacer
porque nunca será suficiente"  (Joaquín Rosillo)