RETO-SUPERACION-EMPODERAMIENTO-TRANSFORMACION

De todas estas acciones he sido testigo de primera mano, en las personas integrantes del grupo Sanarte de San Juan de Aznalfarache. Resultado de una experiencia silenciosa y continua de trabajo personal, acompañamiento, potenciacion, aceptación y acogida desde el mes de octubre de 2016 en que se inició el proyecto y que hemos ido construyendo cada martes. Una iniciativa pública municipal a cargo de las Delegaciones de Igualdad y Bienestar Social que de forma conjunta e interdisciplinar ponen en practica de forma real y efectiva el significado de la promoción de las personas y su participación en la vida del pueblo.

Ya en el año 2000 comenzamos con estas experiencias de teatro social, sirviéndonos de las artes escénicas para promover el crecimiento personal. Sólo aquellas personas capaces de comprender la mente y el alma humana son capaces de valorar el profundo trabajo psico-socio-emocional y comunitario que se hace en este tipo de intervenciones. Así nacieron obras inéditas como:

"La historia de la humanidad a ojos de las mujeres"
"El tiempo de las mujeres"
"Dos bodas y un funeral"
"La revelión de las griegas (musical)"
"El patio de Doña Paca"
"San Juan city."
o nuestra obra magna de la Historia de nuestro pueblo en la que participaron más de cuarenta actores y actrices entre vecinos/as, directivos/as de asociaciones vecinales, profesionales de los servicios sociales, pastor evangélico, personas mayores, niños/as y que se estrenó en el CEIP Esperanza Aponte. 

Comedias todas ellas originales, escritas para cada ocasión y que encerraban siempre mensajes profundos de tolerancia, convivencia, respeto y también, ¿por qué no? de desarrollo de nuestro pensamiento crítico, tan necesario en los tiempos en que vivimos. 

En esta ocasión, e incluída en la programación de Ventanas a la Alegría, conjunto de acciones de promoción de la salud y la igualdad, desarrolladas desde la corporación local, la obra "Locura de Atar"  representaba una jornada cualquiera en un hospital psiquiátrico muy especial, en el que el cuidado humanizado y el cariño, sustituyen por una vez, a la medicación invasiva y las etiquetas diagnósticas limitantes. La norma del centro era el Respeto a lo diverso. 

El publico asistente rió, se emocionó y se introdujo de lleno en el espacio clínico, y lo que es más importante, se marchó a casa con el corazón tocado y el disfrute compartido por el trabajo actoral. Nuestros niños y niñas del grupo, (a pesar de sus ochenta y tantos de algunos...), dejaron el listón bastante alto. Trabajaron mucho, pusieron su entusiasmo y su alma en la obra y así se "desnudaron" ante el público. 

Este es el objetivo del Teatro social, provocar cambios en las personas espectadoras, en la persona artista intérprete, en el entorno...Y ese objetivo fue conseguido.

FELICIDADES GRUPO. Es un orgullo trabajar con vosotros/as. Y a mis compis que me permiten hacerlo...GRACIAS MIL. (después de casi siete años en la sombra teatral, renacer de este modo, es un precioso regalo para el alma en estos momentos...).  















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